En el mercado podemos encontrar Ofertas Congeladores Verticales baratos que hacen que adquirir uno de estos aparatos salga a cuenta. Pero, dejando a un lado el precio, ¿son realmente mejores que los congeladores de arcón? Veamos las ventajas que nos proporcionan.
Para empezar, necesitas menos espacio para igual capacidad. Realmente no es que sea menos espacio, pero sí menos ancho, ya que un congelador vertical es más alto y estrecho siendo más sencillo hacer que encaje en cualquier lado.
Es mucho más cómodo coger cualquier cosa, ya que el congelador vertical está perfectamente compartimentado en cajones. Solo tienes que abrir el cajón de la carne, del pescado, de la verdura o de las pizzas y coger exactamente lo que deseas. Todo tiene un orden perfecto y hay un espacio para cada cosa diferenciado.
Sin embargo, en el congelador de arcón es más fácil que todo se mezcle y que haya que apartar varias cosas para poder acceder a lo que está más abajo, lo que hace que finalmente muchas cosas se estropeen porque llevan demasiado tiempo en el congelador sin que nos acordemos de ellas.
Otra de las ventajas del congelador vertical es que al estar dividido en cajones es mucho más sencillo de limpiar. Solo tienes que quitar el cajón y lavarlo, aunque el resto estén llenos de cosas. No es necesario esperar a que esté vacío del todo.
También tienen algunas desventajas, por ejemplo, a la hora de congelar alimentos de gran tamaño. Sin embargo, lo normal es que nadie congele una pieza de costillar completo, sino que lo divida en raciones, lo que hace que sea mucho más manejable y práctico.
También es cierto que con el sistema de cajones se pierde una pequeña parte del espacio, pero al ganarse en orden y organización queda más que compensado. En la mayoría de los hogares, un congelador vertical es la mejor opción para el día a día.
Por el contrario, en locales de hostelería donde se manejan grandes cantidades de comida congelada puede ser preferible un congelador de arcón de gran capacidad, en el que caben los paquetes de tamaño industrial sin problemas y en los que se pueden acumular grandes cantidades de comida, algo que no es práctico en un hogar, pero sí en un establecimiento en el que todo se vende con rapidez y no se queda acumulada la mercancía.