Los estilos de cortinas han ido cambiando a lo largo del tiempo. Hace años, la tendencia venía marcada por cortinas onduladas con bastante vuelo y que llevaban unos tipos de cintas para cortinas especialmente diseñados para colocar ganchos que eran los que se colgaban del riel. A esta cortina se le podía unir un cortinón a cada lado, con su riel específico y también un volante en la parte superior que no solo cubría por completo el riel, también podía servir para cubrir la caja de la persiana.
De esta forma, toda la ventana quedaba cubierta e incluso también parte de la pared y la caja de la persiana. Pero estas cortinas son caras, ya que hay que hacerlas a medida y además implican planchar telas y colgar y descolgar cada vez que hay que lavar. Por eso, las siguiente generaciones apostaron por sistemas más sencillo. Se popularizaron entonces las cortinas de ojos.
Las cortinas de ojos son extremadamente simples. Una barra y una cortina con agujeros cubiertos por embellecedores. Solo hay que pasar la barra por los agujeros y la cortina, sencilla y cómoda, ya está colocada. Un estilo de cortina que se adapta a todos los largos y anchos pero que también tiene sus puntos en contra.
Uno de los puntos en contra de estas cortinas es que la barra queda a la vista y esto no siempre gusta a todo el mundo. Es un sistema que puede ser perfecto para una sala de estar informal pero que en un salón elegante parece que no acaba de encajar. Por eso, se ha seguido evolucionando y ahora las cortinas más populares son aquellas que se colocan en una barra mucho más fina, usando una cinta especial para pasar estas barras de manera que queden absolutamente invisibles.
Este sistema tiene la sencillez de las cortinas de ojos, pero a la vez es mucho más elegante ya que solo se ve la tela, lo que les da a las cortinas una apariencia similar al riel. Para conseguir un efecto todavía más atractivo, se han popularizado las dobles barras que permiten tener un visillo fino para el día y dos cortinas más gruesas que se cierran por la noche para garantizar la intimidad.
La doble cortina con sistema de barra invisible es, sin duda, el más actual y el que está ganando más adeptos ahora. ¿Te apuntas a esta moda?