Aventuras Mágicas de un Fanático de la Fantasía

Desde que era un niño, siempre me ha gustado perderme en las páginas de los libros de fantasía más increíbles. Desde mundos mágicos hasta criaturas fantásticas, había algo en estos libros que siempre me hacían sentir como si pudiera estar en cualquier lugar. Pero mi amor por la fantasía no fue siempre bien recibido por otros.

 

Recuerdo una vez cuando estaba en el colegio y había terminado de leer una de mis novelas favoritas de fantasía. Estaba tan emocionado que quería compartir mi entusiasmo con algún amigo, así que les conté todo sobre la historia. Pero en lugar de mostrar interés, se burlaron de mí diciendo que los libros de fantasía eran solo para niños pequeños.

 

Aunque sentí mucha vergüenza en ese momento, nunca dejé que la opinión de otros afectara mi pasión por los libros de fantasía. Cada vez que iba a la librería, corría directo a la sección de fantasía y compraba los libros más interesantes que pudiera encontrar.

 

Un día, mientras estaba navegando por internet, descubrí que había una librería en Ferrol que tenía una gran selección de libros de fantasía. Sin pensarlo dos veces, salté a mi auto y conduje hasta allí para explorar su colección.

 

Cuando entré en la tienda, estaba emocionado de ver tantos libros de fantasía en un solo lugar. Pasé horas mirando cada título y finalmente decidí comprar algunos. Pero justo cuando estaba listo para hacer mi compra, me di cuenta de que había olvidado mi billetera en casa.

 

Me sentí tan frustrado en ese momento. ¿Cómo podía ser que después de conducir todo el camino para comprar libros de fantasía Ferrol, no pudiera pagar por ellos? Pero entonces, recordé que había una solución sencilla. Llamé a mi amigo que vivía cerca y le pedí que me preste algo de dinero.

 

Finalmente, pude hacer mi compra y caminé fuera de la tienda con mis nuevos tesoros bajo el brazo. Mientras me dirigía de regreso a casa, sentí una mezcla de emoción y felicidad sabiendo que tenía muchos libros nuevos para leer y disfrutar.

 

Desde ese día, he aprendido que no importa lo que piensen otros de tus pasatiempos o intereses personales. Si te apasiona algo, sigue adelante y disfrútalo al máximo. Y si alguna vez te encuentras en Ferrol, asegúrate de visitar la librería local de fantasía. No te arrepentirás.